El libro de Norbert Schoenauer (6000 años de hábitat, Gustavo Gili), difícil de encontrar incluso en bibliotecas públicas, es el único en nuestro idioma que compila y explica un gran número de viviendas primitivas —todas ellas, me gusta a mí decir, "anteriores a la decoración"—, pertenecientes a un estadio de desarrollo material semejante al que seguramente habían alcanzado nuestros antepasados a finales del Paleolítico. Todas estas viviendas coinciden en la necesidad de construir cúpulas bajo las que protegerse de la intemperie.
A
1. REGIONES
CÁLIDAS
1.1. Nómadas
depredadores
Bandas
cazadoras. Grupos o bandas de pocas familias asociadas, lideradas por
un cazador experto: “Según la ocasión, el liderazgo es asumido por un experto
cazador o por un anciano; estos jefes no poseen poderes especiales y se
consideran únicamente primeros entre iguales” (Schoenauer, pág. 15). Al
tratarse de depredadores, abandonan la región ocupada cuando agotan sus
recursos y se trasladan a otra.
Vivienda
instantánea. Cuestión de horas. Viviendas especialmente efímeras, poca
resistencia, se infestan. Se elaboran con los materiales que se encuentran a
mano. Estas viviendas carecen de ventanas, salidas de humo o puertas en los
huecos de entrada.
Dar sombra. Estas viviendas sólo
precisan dar sombra pues se encuentran en zonas desérticas: pigmeos y
bosquimanos africanos, aborígenes australianos...
A
Skerm
y werf Las chozas
de los bosquimanos del Kalahari (desierto sudafricano compartido por tres
países: Botsuana, Namibia, Rep. Sudafricana) se denominan skerm y el grupo de chozas, werf, que se sitúa siempre junto a un gran árbol. El
skerm
se elabora con fibras vegetales, paja, que se amontonan sobre unos arcos de
ramas arbóreas. En realidad, prefieren dormir a la intemperie y emplear la
choza para sus pertenencias y tener un poco de sombra. Los bosquimanos son gente muy
pobre y obligada a cooperar porque habitan regiones subdesérticas; es
impensable que un bosquimano no comparta su comida con el resto del grupo.
A
Chozas bambuti impermeables También tienen forma de
colmenas los poblados de los pigmeos bambutis de la selva Ituri (Congo), que
las recubren con las hojas acorazonadas de mongongo, colocadas casi como si
fueran tejas; logran una impermeabilidad total. Es trabajo de la mujer
la construcción de la choza, como es habitual en África. Los pigmeos son pequeños (1,3 m de media), fuertes
y rápidos, además de silenciosos; habitan la selva tropical y cazan lo que
pueden en sus bandas de 6 o 7 familias.
A
Chozas de los
arunta australianos No he
conseguido imágenes de sus chozas, similares a las africanas, de estos
cazadores armados de lanzas y bumerangs. Duermen a la intemperie abrigados por
sus perros.
1.2. Primeros
cultivadores sedentarios
Primeros agricultores. Solamente en las selvas
tropicales, donde todo crece que es una maravilla pero el suelo se agosta
rápidamente por lixiviación (y obliga a sus agricultores a cambiar pronto de
parcela de cultivo) se encuentra un tipo de agricultura llamada a veces turbocultivo o cultivo móvil. La parcela
se incendia antes de cultivarse. Agricultura insuficiente para el sustento,
basada en los tubérculos, maíz, batata y a veces algodón, se necesita seguir
cazando y pescando. Bandas de mayor tamaño, subtribus, construyen viviendas
comunitarias. No poseen nada propio salvo armas y ornamentos; el resto es
comunitario y siempre se trabaja en comunidad.
A
MalocaA Pasan mucho tiempo
dentro de las malocas (término brasileño) para escapar de los mosquitos
chupasangres. Duermen en hamacas colgadas entre los postes. El Amazonas es
región rica en este tipo de tribus y poblados de viviendas comunitarias que
pueden alcanzar los 30 m de largo por 18 de ancho y 9 de alto. Se han
contabilizado hasta 400 tribus, así que la variación en las malocas es elevada.
A
Jacales AEn los villorrios del sur de Méjico hallamos
los jacales, cabañas de madera con techos de paja a dos aguas que heredan de
los pueblos mayas. El granero suele construirse separado y elevado para proteger el grano de los
roedores, semejante al hórreo gallego.
A
2.
REGIONES FRÍAS
A
2.1. Nómadas
cazadores
Inuit, focas. Los inuit extraen toda su economía de las
focas, que les proporcionan alimento, energía para las lámparas (grasa) y ropa
(pieles). También de los caribúes.
IglúA Con nieve
medianamente compacta se crean sillares hasta formar un domo; luego se prende
fuego al interior para sellar el hielo. El suelo está tan frío que se construye
la base 30 cm por encima de él y se tapizan las paredes con pieles. Cerca del
tope del domo hay un agujero para la ventilación, y no es infrecuente encontrar
ventanas de intestino de foca o hielo. Un iglú puede medir 4,6 m de diámetro y,
ocasionalmente, dar cobijo a más de una familia.
TupiqA
Derretido
el iglú, en primavera, los esquimales marchan a cazar a otras zonas y
construyen su tienda de pieles de foca. Aquí vemos que son parientes de los
nómadas esteparios y de las praderas.
2.2. Nómadas
pastores
TiendaA Las poblaciones indias
norteamericanas (naciones cheyenne, sioux y cree, shoshone, blackfoot, comanche
y crow), se alojan en tiendas de pieles: un trípode de palos ahorquillados cubierto
de pieles de búfalo. El fuego del hogar da calor en invierno y ahuyenta a los
insectos en verano. Las mujeres curten y cosen las pieles.
YurtA Las poblaciones nómadas laponas (Finlandia,
Rusia), tunguses (Mongolia, Rusia) crean sus tiendas con pieles de reno y estructura
de ramas de sauce que forma un cilindro de entre 3 y 6 m de diámetro. A veces
se cuelga una piedra del techo para aumentar la estabilidad en casos de viento
huracanado. Se cubre con varias capas de fieltro de lana. Estas poblaciones
aman el caballo, pero los animales que les dan la economía son las cabras y las
ovejas.
Tienda tuaregA Un esqueleto de ramas de acacia
entrecruzados entre una docena de postes. La malla de cubierta está tejida con
fibras de hoja palma. Son gente muy pobre que viven de las ovejas, el trigo y
el mijo, y habitan los márgenes del Sahara.
Tienda negra beduinaA Beduino significa
“hombre de la tienda”. Estas poblaciones nómadas africanas y arábigas son
inseparables de los camellos y de las tiendas. Éstas se levantan con varas
verticales, cuerdas para tensarlas al modo de la tienda de campaña y un gran
cobertor de lana negra de cabra. Se levantan en sólo una hora. En contraste con
el esqueleto del yurt, estable sin techo, la tienda carece de estabilidad sin
su funda. Son bastante planas para minimizar la oposición al viento y de entre
6 y 9 metros de largo. Exceptuando el Tíbet y el Afganistán, la zona de
difusión de la tienda negra coincide con la del camello. Además de los
beduinos, también la utilizan los nómadas berenberes y argelinos del Magreb así
como nómadas kurdos, baluchis y tibetanos.